290. Cuento popular castellano
Un hombre tenía un criado indio que era muy
goloso. Y una vez le envió a casa de un pariente suyo, que vivía en un pueblo
vecino, a llevarle una docena de manzanas en una cesta. Y en el camino el indio
se comió tres.
Al llegar a la casa del pariente, sacaron las
manzanas de la cesta y hallaron una carta donde decía que iban en la cesta una
docena de manzanas. Y le preguntaron al indio:
-Pero, hombre, si la carta dice que venían
doce manzanas, y aquí hay solamente nueve. ¿Qué es de las otras tres?
-No sé -respondió el indio. La carta será
embustera.
Y después le volvieron a mandar con una cesta
con doce racimos de uvas. Y en el camino el indio sacó la carta y la metió
debajo de una piedra pa que no viera lo que él hacía. Y después de poner la
carta debajo de la piedra pa que no viera nada, dijo el indio:
-Ahora sí, aunque quieras, no ves nada.
Y se comió tres racimos de uvas. Y al llegar
a la casa del pariente, sacaron las uvas y la carta. Y contaron los racimos y
faltaban tres, porque en la carta decía que eran doce. Llamaron al indio y le
preguntaron que si sabía de los tres racimos que faltaban, y él dijo que no,
que no sabía. Y el hombre le dijo:
-Pues la carta dice que son doce, y han
venido solamente nueve. Faltan tres. ¡Tú te los habrás comido, indio goloso!
-La carta será embustera -respondió el
indio. Cuando yo me comí las uvas, puse la carta debajo de una piedra onde no
podía ver nada. ¡La carta es una embustera!
Quintanilla
del Coco, Burgos.
Fuente: Aurelio M. Espinosa, hijo
058. Anonimo (Castilla y leon)
Alguien me puede decir dondecomprarlo?
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