El cura y el gitano

310. Cuento popular castellano

Cierto día un gitano pretendía vender una yegua a un señor cura y le decía:

-Monte ustez en la yegua para que vea ustez qué trote más bonito tiene.

El cura le decía al gitano:

-No, hombre. ¿Para qué voy a montar yo? Monte ustez, y ya la veré yo galopar.

-Que no, señor -insistía el gitano; que quiero yo que monte ustez. Tiene un paso que se puede llevar un vaso de agua lleno en la mano y no se cae una gota.

-Le he dicho que yo no monto. Monte ustez.

-¡No tenga ustez miedo! -le seguía diciendo el gitano. Mon­te ustez con toda confianza y déla un paseo largo.

Tanto cansarle al cura, por fin montó en la yegua; y cuando ya llegaba a larga distancia, le gritaba el gitano:

-¡Vuelva ustez, padre! ¡Vuelva ustez ya!

El cura no hacía caso y cada vez corría más la yegua. Y el gita­no no cesaba de gritar:

-¡Vuelva, hombre! ¡Vuelva!

Pero el cura, en vez de volver, se fue tan largo que ya le perdió de vista. Y viendo que el cura se llevaba la yegua, le dice al gitano un señor que se encontraba presenciándolo todo:

-¿En cuánto ha ido la yegua?

A lo que replicó el gitano:

-Pues, señor, en lo mismo que me costó a mí.

Peñafiel, Valladolid. Mariano Ruiz Salinero. 33 de abril, 1936. Dulzainero, 58 años.

Fuente: Aurelio M. Espinosa, hijo                                                            

058. Anonimo (Castilla y leon)