491. Cuento popular castellano
Éste era un gallo muy guapo y muy bonito que
iba a la boda de su tío Tuturubillo. Llevaba mucha hambre, y en el camino se
encontró un montón de trigo. No sabía qué hacer, si picar o no, porque decía:
-Si pico, me mancho el pico; y si no pico, me
quedo con hambre. Por fin picó, y se manchó el pico. Y dice:
-¿Qué haré yo ahora para ir guapo a la boda
del tío Tuturubillo? ¿Quién me limpiará?
Se encontró una malva y la dice:
-Malva, límpiame el pico, que voy a la boda
de mi tío Tuturubillo.
-¡No quiero! -le contestó la malva.
Después se encontró a una oveja y la dice:
-Oveja, come la malva, que la malva no ha
querido limpiarme el pico, que voy a la boda del tío Tuturubillo.
-¡No quiero! -le respondió (todos le iban
respondiendo igual). Se encontró a una zorra.
-Zorra, come a la oveja, porque la oveja no
ha querido comer a la malva, porque la malva no ha querido limpiarme el pico,
que voy a la boda del tío Tuturubillo.
-¡No quiero!
Se encontró a un lobo:
-Lobo, come a la zorra, porque la zorra no ha
querido comer a la oveja, porque la oveja no ha querido comer a la malva, porque
la malva no ha querido limpiarme el pico, que voy a la boda del tío
Tuturubillo.
-¡No quiero!
Después se encontró a un burro y le dice:
-Burro, cocea al lobo, porque el lobo no ha
querido comer a la zorra, porque la zorra no ha querido comer a la oveja,
porque la oveja no ha querido comer a la malva, porque la malva no ha querido
limpiarme el pico, que voy a la boda del tío Tuturubillo.
-¡No quiero!
Luego se encontró a un palo.
-Palo, pega al burro, porque el burro no ha
querido cocear al lobo, porque el lobo no ha querido comer a la zorra, porque
la zorra no ha querido comer a la oveja, porque la oveja no ha querido comer a
la malva, porque la malva no ha querido limpiarme el pico, que voy a la boda
del tío Tuturubillo.
-¡No quiero!
Después se encontró a una lumbre y la dijo:
-Lumbre, quema al palo, porque el palo no ha
querido pegar al burro, porque el burro no ha querido cocear al lobo, porque el
lobo no ha querido comer a la zorra, porque la zorra no ha querido comer a la
oveja, porque la oveja no ha querido comer a la malva, porque la malva no ha
querido limpiarme el pico, que voy a la boda del tío Tuturubillo.
-¡No quiero!
Luego se encontró a un cubo de agua.
-Cubo de agua, apaga a la lumbre, porque la
lumbre no ha querido quemar al palo, porque el palo no ha querido pegar al
burro, porque el burro no ha querido cocear al lobo, porque el lobo no ha
querido comer a la zorra, porque la zorra no ha querido comer a la oveja,
porque la oveja no ha querido comer a la malva, porque la malva no ha querido
limpiarme el pico, que voy a la boda del tío Tuturubillo.
-¡No quiero!
Después se encontró a un elefante y le dice:
-Elefante, bebe el cubo de agua, porque el
cubo de agua no ha querido apagar a la lumbre, porque la lumbre no ha querido
quemar al palo, porque el palo no ha querido pegar al burro, porque el burro
no ha querido cocear al lobo, porque el lobo no ha querido comer a la zorra,
porque la zorra no ha querido comer a la oveja, porque la oveja no ha querido
comer a la malva, porque la malva no ha querido limpiarme el pico, que voy a
la boda del tío Tuturubillo.
El elefante quería beber el cubo de agua, y
el cubo de agua quería apagar a la lumbre, y la lumbre quería quemar al palo, y
el palo quería pegar al burro, y el burro quería cocear al lobo, y el lobo
quería comer a la zorra, y la zorra quería comer a la oveja, y la oveja quería
comer a la malva. Y entonces la malva le limpió el pico al gallo.
Entonces le dice el gallo al elefante:
-Ya que has sido tan buen amigo, irás conmigo
a la boda de mi tío Tuturubillo.
Llegaron y llamaron a la puerta. Los dos de
la boda respondieron por una ventana, y viendo a esos personajes tan elevados,
como el elefante, dijeron que no le admitían, ni al gallo ni a él.
Entonces fue el gallo y le dio permiso al
elefante para que se comiera a todos los invitados. Y el gallo y el elefante
siguieron amigos hasta el fin de sus días.
Pedraza
de la Sierra ,
Segovia. María
Pascual. 24
de marzo, 1936. 28
años.
Fuente: Aurelio M. Espinosa, hijo
058. Anonimo (Castilla y leon)
No hay comentarios:
Publicar un comentario