Un
erizo muy rico vivía en lo profundo de un bosque. Todo el mundo le
quería y tenía muchos amigos.
Un
día, llegó al bosque un ladrón dispuesto a raptarlo para pedir
después un rescate.
Se
acercó a la casa del erizo y gritó:
-¡Erizo!
¡Ábreme! ¡Te traigo un bonito regalo!
El
erizo salió y, en ese momento, el ladrón intentó atraparlo.
Pero
no sabía que nuestro erizo era muy rápido. Se hizo una bola y el
ladrón se hirió los tobillos con las púas.
Salió
corriendo a todo correr y nunca más volvió.
0.999.1
anonimo cuento - 063
No hay comentarios:
Publicar un comentario