Alguien dijo: "Los cuentos nos ayudan a enfrentarnos al mundo"

Era se una vez...

8-2-2015 a las 21:47:50 10.000 relatos y 10.000 recetas

10.001 relatos en tiocarlosproducciones

10.001 recetas en mundi-recetasdelabelasilvia

Translate

lunes, 11 de junio de 2012

El maestro impávido

Había un maestro imperturbable. Tenía un gran corazón y era excepcional-mente compasivo, pero nada ni nadie podía alterarlo. Siempre mantenía su calma profunda y su equilibrio, hasta tal punto que algunos de sus discípulos dudaban de si el maestro fingía esa asombrosa impavidez o si es que realmente nada podría ya perturbarle. Los discípulos polemiza­ban a menudo sobre ello. Unos decían:
-Seguro que en su interior no es tan calmo.
Otros:
-Si un día le sucediera algo grave, probablemen­te no lograría mantener esa imperturbabilidad.
Otros:
-Claro, es fácil aparentar tanta calma si no te sucede nada desagradable.
El maestro sabía de las dudas de sus discípulos, pero eso tampoco lo inmutaba. Él había conseguido el rango del ser iluminado que vive en el mundo sin estar en él.
Cierto día, estaban maestro y discípulos cele­brando una reunión espiritual, cuando de repente una serpiente extraordinariamente venenosa picó al maestro en el cuello. El espanto fue general entre los discípulos. Aquella mordedura era necesariamente mortal. En pocos minutos el maestro habría abando­nado su cuerpo. Todos se quedaron atónitos cuando comprobaron que el mentor no perdió su impavidez e incluso sonrió como si nada hubiera pasado, aun­que era bien consciente de que le quedaban pocos minutos de vida. Viéndolo tan imperturbado, los discípulos le preguntaron cómo lograba hacerlo. Declaró:
-Queridos míos, si estáis en un carnaval y no sabéis qué es un carnaval y veis dragones fantasmas, esqueletos... todo ello, tomándolo por real, os angus­tiaría y atemorizaría. Pero si sabéis que es parte de un carnaval y no lo consideráis real, nada de ello os alte­raría e incluso os divertiría o entretendría. Como estoy instalado en mi real naturaleza interior, nada de lo que contemplo puede alterarme. Os quiero de corazón. Buscad la liberación sin descanso.
Y su cuerpo se desplomó contra el suelo. Había muerto, pero la sonrisa, más hermosa de cuanto pue­da decirse, persistía en sus labios.

El Maestro dice: Cuando alcanzas la total evolu­ción de la consciencia, el espectador deja de ser el espectáculo. ¿Qué habrá entonces que pudiera inquie­tarle?

Fuente: Ramiro Calle

004. anonimo (india)

No hay comentarios:

Publicar un comentario