Una vuelta, cuando los animales
hablaban, este, el zorro, que siempre fue muy vivaracho, ¿no?, por eso tiene el
nombre de zorro, le decía a un gallo que estaba arriba di una planta:
-Bajesé más abajo. Vamos a
conversá. ¿No sabe las leyes nuevas que hay ahora?, dice, que somos todos
amigos, dice, ya el perro con el zorro, el zorro con el gallo... Ya pueden
hablar, pueden tomar las copas juntos... dice. Ya nu hay más esas diferencias
que teníamos antes.
Y en esa conversación 'taban el
gallo con el zorro y el gallo se venía bajando cada vez más. Y por áhi siente
el zorro ladrá unos perros. Y paró l'oreja, ¿no? Y cuando paró l'oreja le dice
el gallo:
-Vienen unos perros -dice el zorro.
¡Ya 'tán muy cerca! ¡Vaya que haya algún loco que no sepa las leyes nuevas y me
quiera agarrar!
A la orilla di un arroyo,
cantaba un zorro,
y vinieron los perros
y apretó el gorro.
Tomás Lértora, 73 años. Punta
Indio. Magdalena. Bueno Aires, 1969.
Nativo del tradicional Pago de la Magdalena. Diestro
en las múltiples tareas del campo.
Cuento 73. Fuente: Berta Elena Vidal de Battini
0.015.1 anonimo (argentina) - 030
No hay comentarios:
Publicar un comentario