El
convite
Doña
Garza la había envitado a la comadre Juana
a un banquete en su casa. La noche del festín, doña Garza preparó
mazamorra, pero la puso en una botija cuello largo y angosto, de
manera que la zorra no podía sacar ni un granito. La garza le decía
a la zorra:
-Sirvasé,
comadre Juana. La mazamorra mi ha salido riquísima. Sirvasé sin
cumplimiento. Sirvasé.
Y
como una farsa la envitaba, mientras ella comía y comía. La zorra
lambía la botija y se li hacía agua la boca, pero sólo sentía el
olor de la mazamorra que 'taba muy rica.
La
cuma Juana se despide muy agradecida de su comadre y la envita a
comer, a la noche siguiente a su casa. Pero esta vez la zorra no jue
zonza y se vengó de su cuma. También le sirvió mazamorra, pero la
hizo muy jugosa y con los granos muy deshechos, y se la sirvió en
una juente bien plana y ancha. Esta vez la qui hacía postura pa
comer era la cuma garza, que no conseguía alzar nada, ni un granito
con su pico largo. Esto causó un gran dijusto de la cuma, y la garza
sin despedirse de la dueña de casa, levantó el vuelo y se jue,
jurando vengarse.
Arcelio
Contreras, 63 años. Villa Iglesia. Iglesia. San Juan, 1951.
Campesino
rústico. Buen narrador.
En
este cuento se cambia el orden del papel de los personajes.
Cuento
645. Fuente: Berta Elena Vidal de Battini
0.015.1
anonimo (argentina) - 048
Lo contaba mi abuelito en Chile, muy lindo!!
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