El
tigre no podía con el zorro. Entonce dice:
-Tenemos
que librarle una guerra al zorro. Es la única forma de matarlo.
Nosotros buscamo los animales más feroces, los leone, los elefante,
las panteras, todos los más malos.
Y
el capitán habló a los animales feroces, y ya viene y le dice al
tigre que estaban listos. Y entonce le dice:
Entonce
se fue a ver las abejas. Y la madre de las abejas le dijo:
Entonce
va adelante el zorrino a decirle al zorro que estea listo. Y el zorro
le dijo que estaba muy bien y le largó unas poquitas abejas. Y lo
agarraron al zorrino por la cola, por los ojos, por las orejas, que
casi lo enloquecieron, y se tuvo que largar al agua pa librarse. Y le
dijo al tigre que el zorro esperaba la guerra, pero no le contó de
lo demás.
Entonce
ya marchó con su ejército el tigre y le dice al zorrino que vaya
adelante. Y el zorrino no quiso por nada:
Y
cuando llegaron salió el avispero y se les prendieron las abejas por
todos lados a los animales feroces y al tigre. Y estaban locos, se
revolcaban y no sabían qué hacer. Y el zorrino les comenzó a
gritar, bien de lejos:
Vicente
Rossi, 61 años. Tandil. Buenos Aires, 1957.
Es
el único cuento en el cual el tigre le declara esta guerra al zorro.
Cuento
531. Fuente: Berta Elena Vidal de Battini
0.015.1 anonimo (argentina) - 033
No hay comentarios:
Publicar un comentario