Los pájaros habían sido
invitados para un banquete en el cielo donde todos harían conocer sus
habilidades. Enterandosé el sapo de esto, quiso tomar parte en la reunión y
como él no podía volar, buscó la manera de llegar al cielo. Como el águila
llevaba una guitarra atada al cogote, en un descuido de ésta, se le ocurre al
sapo meterse en la guitarra, llegando de esta forma al banquete. Cuando estaban
reunidos cantando, quedaron sorprendidos al sentir el canto del sapo, inorando
cómo pudo llegar al cielo.
Terminado
el banquete dispusieron volver a sus casas. Todos estaban de acuerdo de
descubrir cómo podría bajar el sapo y lo vieron entrar en la guitarra del
águila. Entonces ésta dispuso colocar la guitarra boca para abajo, y cuando
empezó a volar lo largó al sapo. Y cuando se iba cayendo, gritaba:
Y como
naides lo ausilió cayó haciendosé pedazos. Y de allí que las manchas que tiene
en el cuerpo, el sapo, son consecuencia de dicho golpe.
José Amaya, 66 años.
Chepes. General Roca. La Rioja ,
1950.
Campesino rústico.
Buen narrador.
Cuento 537. Fuente: Berta Elena Vidal de Battini
0.015.1 anonimo (argentina) - 030
No hay comentarios:
Publicar un comentario